WASHINGTON.- Nikki Haley ganó las primarias presidenciales republicanas en Washington DC este domingo, su primera victoria en una carrera por la nominación de su partido que ha estado marcada por el dominio aplastante de Donald Trump.
La victoria de Haley en la capital del país se produce a dos días de un día decisivo en el largo proceso de nominación de Estados Unidos: el Supermartes, cuando 15 estados y un territorio votarán por su nominado favorito.
Washington es una ciudad sólidamente demócrata y con un número de republicanos registrados muy pequeño. La cadena CNN y otros medios informaron que Haley ganó el domingo con un aproximado de sólo 22.000.
Haley obtuvo el 63% de los votos en una primaria que se llevó a cabo solamente en un hotel en el centro de la ciudad, según el portal Politico, que citó a funcionarios del partido en Washington.
En las elecciones de 2020 contra Trump, el entonces candidato Joe Biden obtuvo el 92% de los votos en Washington. De hecho, la ciudad nunca ha registrado una mayoría de votos a favor de un candidato presidencial republicano.
“No es sorprendente que los republicanos más cercanos a la disfunción de Washington rechacen a Donald Trump y todo su caos”, dijo la campaña de Haley a través de un comunicado.
La campaña de Trump, por su parte, publicó que los resultados en Washington DC “reafirman el objetivo de la campaña del presidente Trump: drenar el pantano y poner a Estados Unidos primero”.
Se espera que tras el Supermartes Trump quede al borde de asegurar la nominación presidencial por el Partido Republicano, pues ya barrió en todas las primarias estatales anticipadas
El Supermartes se considera la última oportunidad real para que Haley se atraviese en el camino del expresidente que va rumbo a convertirse una vez más en el abanderado del partido, de nuevo contra Biden.
Millones de estadounidenses de Maine, California, Texas, Virginia, Alaska o Arkansas, entre otros estados, acudirán mañana a las urnas para elegir a sus candidatos demócratas y republicanos para las elecciones de noviembre.
Este gran día electoral acapara una enorme atención mediática, pero este año será diferente porque el resultado es predecible.
Trump, de 77 años, es el gran favorito a pesar de sus problemas legales. El expresidente ha ganado casi todas las primarias de su partido desde enero, con excepción de Washington DC. Muchos de sus rivales han tirado la toalla por el camino.
Según las encuestas, se espera que Donald Trump gane en todos los estados en juego el martes, gracias al apoyo de una base de simpatizantes leales.
A pesar de las derrotas sufridas, incluida una en Carolina del Sur, el estado del que fue gobernadora, Nikki Haley ha aguantado y se ha negado hasta ahora a tirar la toalla porque sería “la salida más fácil”.
¿Permanecerá en la carrera si los malos resultados continúan acumulándose el martes? “Vamos a seguir hasta el Supermartes”, dijo Haley a los periodistas a finales de febrero. “Eso es todo lo que he pensado” en términos de estrategia, añadió.