Un joven de 18 años quedó detenido luego de que su padre lo entregara en una comisaría, acusado de ser uno de los agresores que atacaron al joven Lautaro Diego Alvarado, quien sigue internado con muerte cerebral tras ser atacado a golpes a la salida de un boliche de Laferrere.
La detención del sospechoso ocurrió en la comisaría de Laferrere a las 23 del jueves, donde un hombre se presentó con su hijo acompañado de un abogado debido a que era buscado como partícipe del ataque al joven.
El joven se presentó y quedó a derecho acusado como coautor de homicidio, alojado en la dependencia policial luego de un acuerdo entre las partes dado durante un operativo en la casa de la familia.
En tanto, la policía bonaerense sigue con los procedimientos para dar con otros dos sospechosos que participaron de la agresión contra Lautaro Alvarado y sus amigos.
Voceros policiales dijeron que Alvarado sigue internado en una clínica de Moreno, adonde fue derivado tras la golpiza que sufrió la madrugada del lunes y culminó con una patada que recibió en la cabeza.
Al respecto, el auditor de la clínica, Silvio Ortuondo, señaló a la prensa que Lautaro está con «muerte cerebral» y que las expectativas de sobrevida son «nulas».
El joven había ido a bailar con un grupo de amigos a Cyrux, en avenida Luro y Pedro Obligado, de Laferrere, y después de una discusión dentro del boliche fue atacado por otro grupo de jóvenes en una plaza, a unos 100 metros.
De acuerdo a lo establecido hasta el momento, en el local bailable se generó una pelea entre el grupo en el que estaba Lautaro y otros jóvenes, que se trasladó a una plaza ubicada a cien metros.
En un momento de la pelea que involucraba a varios jóvenes, Lautaro cayó al piso, donde recibió fuertes golpes en la cabeza hasta quedar inconsciente.
El joven fue primero llevado al Hospital Germani, de Gregorio Laferrere, y luego derivado a la Clínica Mariano Moreno, donde se encuentra actualmente internado.
Uno de los amigos de Lautaro que estaba con él en el momento de la agresión declaró que la pelea se inició cuando un joven se enfrentó a golpes de puño con uno de los integrantes de su grupo porque le habían roto los lentes adentro del boliche.
Cuando la gresca comenzó dentro del boliche, el personal de seguridad del local decidió expulsar a todos los que habían participado de la pelea.
La salida de la víctima y sus amigos del boliche quedó registrada por una cámara de seguridad del mismo boliche. Lautaro y sus amigos caminaron hacia la Plaza Ejército de los Andes, ubicada a menos de 100 metros del local bailable, y allí fueron atacados a golpes.