La lenta recuperación del salario real marca un nuevo momento en la evolución del consumo en la Argentina: aunque la reactivación aún no llega, hay sectores que si crecen y, apuntalados por los planes de cuotas para tarjetas, algunos empiezan a mostrar señales de mejora. Así lo refleja el último índice Payway, que analiza los hábitos de pago de los argentinos en el tercer trimestre del año.
El estudio, donde se recopilan las transacciones la red de adquirencia de Payway, (terminales POS, QR, sistemas propios, eCommerce, débitos automáticos, entre otros), retiros de efectivo y transacciones electrónicas para servicios e impuestos, muestra que el sector de entretenimiento y las compras en supermercado sostienen su dinamismo, aún con patrones distintos de comportamiento entre los consumidores. El primero presenta un crecimiento de 22% comparado con el mismo periodo de 2023, mientras que las compras en super aumentaron un 8% en el último año.
«Hay una caída que se refleja en las ventas de electrodomésticos, sobre todo los pequeños y línea blanca, que obviamente ante la caída de los ingresos familiares es lo primero que se pospone. Lo mismo ocurre con la construcción», explicó al respecto, el economista Martín Kalos, de Epyca Consultores.
«Hay otros rubros que permiten compras más pequeñas, donde se puede apelar a segundas o terceras marcas, que consiguen mantenerse. Por último, hay nichos de más poder adquisitivo que sí están pudiendo consumir algo más. Y eso se observa en algunos sectores de los electrodomésticos, en algunos electrodomésticos puntuales, los datos oficiales del INDEC revelan una suba en algunas ventas, por ejemplo, de algunas cuestiones con pantalla, de televisiones, cámaras, y del entretenimiento. En los shoppings hay más consumo, en los cines hay más consumo, en los jueguitos electrónicos hay más consumo, en los patios de comida», apuntó.
Dentro del universo de los medios de pagos digitales, las tarjetas de crédito concentran la mayoría de las operaciones (58% del total realizado). «En el análisis del consumo con tarjeta de crédito se visualiza que los planes de cuotas sostuvieron valores del trimestre anterior empujados por promociones de los emisores de tarjetas y la ampliación del Cuota Simple, cuyas versiones de 9 y 12 cuotas ganan participación dentro del programa», detalló el estudio.
Al mismo tiempo, el uso de tarjetas de débito aumentó un 10% interanual, en detrimento del de efectivo, según datos de Payway.
En este punto, Kalos destacó: «Se observa también un resurgimiento de la tarjeta de crédito como opción de pago. Pese a que también crece el uso de tarjeta de débito en el último año, pero la tarjeta de crédito termina hoy volviendo a tener una participación de más del 58% del total del volumen operado con tarjetas, y la de débito se mantiene en un muy digno 41%. Esto habla de una mayor bancarización, de una mayor formalización, que no refiere en verdad a que haya caído la cantidad de empleo no registrado ni de economía informal, sino a las mayores facilidades para pagar por medios electrónicos por parte de quienes los tienen«.
El estudio, además, muestra un crecimiento en el uso de los pagos contactless, en el centro de la escena luego de que el Gobierno autorizara la «apertura» del sistema SUBE y obligación para los comercios de «acercar el pos» a la hora de cobrar.
Emiliano Porciani, CBO de Payway, comentó: «en la adquirencia Payway, los pagos con billeteras contactless crecen 27 veces respecto al año pasado”. Señaló también: “gracias a la inversión de 60 millones de dólares en terminales inteligentes contactless sumado a la renovación del parque de tarjetas con dicha tecnología coronado por la nueva normativa de la Secretaría de Comercio de La Nación, que entró en vigor en su totalidad el 12 de septiembre, está provocando un verdadero cambio de hábito hacia los pagos sin contacto, el mecanismo más simple y rápido del mercado”.