Pese a que son competidoras en el negocio agrícola, 8 empresas del comercio y procesamiento de granos acordaron participar en conjunto de la reactivación de la planta de molienda de Vicentin ubicada en San Lorenzo, al norte de Rosario, y garantizarán el empleo y el pago de salarios por 6 meses.
A partir de la intervención judicial dispuesta semanas atrás por el juez Fabián Lorenzini, y con el aporte protagónico del ministro de Trabajo santafesino, Roald «Coco» Báscolo, se acordaron contratos para procesar más de 500 mil toneladas de soja por mes.
El ministerio de Trabajo de Santa Fe convocó a una reunión este viernes, junto a la intervención judicial, y tras ello se informó las características del acuerdo.
A partir de los próximos días comenzarán a ingresar más de 500 mil toneladas de soja mensuales, lo que permitirá retomar las operaciones y asegurar la continuidad laboral de cerca de mil empleados.
Las compañías que participarán del esquema son Viterra, Bunge, ACA, las tres que participaron en el plan pagos del concurso, Molinos Agro, que formó parte de ese grupo de interesados estratégicos al comienzo -luego fue reemplazado por Bunge-, Unión Agrícola Avellaneda, Cargill, Dreyfus y el Grupo Grassi, que hasta ahora ha representado la oposición a las propuestas de Vicentin.
Los contratos se firmaron por seis meses, bajo la modalidad a fasón, y prevén la molienda de entre 350 mil y 380 mil toneladas mensuales. Además, se comprometieron otras 250 mil toneladas destinadas a la planta de Ricardone, lo que representa un nivel de abastecimiento relevante para sostener la actividad.
El acuerdo fue recibido con alivio por los trabajadores. El Sindicato Aceitero de San Lorenzo (SOEA) celebró la decisión y destacó que la medida permite “mantener la paz social y las plantas operando mientras avanza el proceso concursal”.
La intervención judicial, que reemplazó a la conducción histórica de Vicentin, por la gestión de los interventores Andrés Shocrón y Guillermo Nudemberg, “creó las condiciones de seguridad jurídica necesarias para que las empresas decidieran sumarse al esquema”, interpretó el gremialista Daniel Succi, secretario general del SOEA.
Según explicaron fuentes cercanas a las negociaciones “esto permitió recuperar la confianza en el proceso, dejar de lado diferencias y apostar a que la compañía no transite el cram down en medio de una crisis, sino operando con normalidad”,
Con este nuevo esquema, las agroexportadoras no solo obtienen condiciones competitivas para el fasonado, sino que también logran sostener la unidad productiva, clave para evitar la quiebra definitiva de la histórica compañía, destacaron.
La intervención judicial de Vicentin logró revertir el escenario crítico que enfrentaba la empresa tras el vencimiento, a fines de febrero, de los contratos de fasón con Bunge, ACA y Viterra.
Luego de que el directorio comunicara a la Corte Suprema de Santa Fe que cerraría las plantas —cosa que finalmente ocurrió— argumentando la falta de interesados en enviar granos, la Justicia intervino la compañía y contra algunos pronósticos, generó las condiciones para que aparecieran nuevas ofertas.
El acuerdo con ocho empresas para procesar más de 500 mil toneladas de soja mensuales dejó en evidencia que el problema no era la falta de mercadería en el mercado. La llegada de los nuevos contratos permitió destrabar la situación y comenzar a reactivar las plantas, tras casi dos meses de paralización y con los salarios de los trabajadores atrasados.
Desde el SOEA celebraron los avances y destacaron que la prioridad debe seguir siendo el pago de los sueldos. “Se han dado pasos concretos que permiten recuperar previsibilidad y sostener los puestos laborales”, afirmó el gremio en un comunicado, tras conocerse que la intervención judicial pagó esta semana el 20% del salario adeudado de marzo.
Los responsables actuales de la gestión de la emprresa prometieron informar en los próximos días la fecha de pago de un nuevo tramo correspondiente a abril, según se vaya efectivizando la entrega de los granos, en medio de una cosecha que avanza a paso firme y con mejores resultados de los esperados tiempo atrás.