«Se me pone la piel de gallina al verlo, porque no me pude controlar», explicó este martes Sergio Martínez, el hombre que fue protagonista de un video que generó una ola de indignación en las redes sociales durante las últimas horas. En ese registro, filmado el pasado jueves, se lo observa golpear a su hija en el piso debido a que ella, una adolescente, andaba en moto sin usar casco.
Este martes brindó, desde Mar del Plata, una entrevista televisiva para excusarse por lo difundido. «Me siento muy mal por no poder recuperar la confianza de mi hija», afirmó compungido ante las cámaras. No es la primera vez que ofreció justificaciones acerca de lo sucedido, dado que en el mismo instante en que todo sucedía explicó su accionar.
El hecho ocurrió el jueves pasado, cerca de las 21, en la intersección de Belgrano y Almafuerte, en Saladillo. Según el portal local Convergencias, Martínez les había pedido a su hija y a quien la acompañaba que frenaran la moto porque iban sin casco, pero no le respondieron.
Él respondió con una brutal golpiza contra su hija: primero la tiró al piso y después, le dio una patada. Los reproches de los vecinos testigos fue unánime: «¿Cómo le vas a pegar así? ¿Sos tarado», se escuchaba a una vecina. «Yo estoy cuidando a mi hija, no quiero que se mate. Prefiero pegarle una piña y que no se mate, ¿entendés?», gritaba Martínez.
El video se difundió y generó una ola de repudio. Este martes el talante de Sergio «Cui» Martínez, como se lo conoce en Saladillo, fue otro. En tono lastimero, explicó desde Mar del Plata: «Se nos escapó de las manos el control de Olivia (su hija, de 15 años, a quien agredió). Fue un error comprarle una moto para sus quince años, porque ella comenzó a hacer frente a su madre y planteándonos a ambos algunos problemas».
«No pude controlar mi impotencia, pero no fue intención darle ese voleo en el traste y ese cachetazo. Jamás levanté la mano a mis hijos, jamás. Pero la patada que le di a mi hija, en el piso, estuvo muy mal, aunque no pateé para hacerle daño, sino para llamar la atención», continuó Martínez, en diálogo con «Telenoche».
Además, constató, que resultado del video difundido, una fiscal labró un acta que le impuso una restricción perimetral por un periodo de siete días tanto para con su hija como para con el joven que la acompañaba el jueves. Reconstruyó, a su vez, cómo los encontró: «Fue de casualidad, porque yo viajaba con mi pareja y los crucé tirando cortes… Yo tendría que haberle vendido la moto hace meses, pero le di oportunidades porque pensé que nos daría bolilla. Le regalamos el casco y no lo lleva ni en la mano».
En el video difundido, se observó cómo Martínez se subió sin casco a la moto de su hija, luego de golpearla, y la condujo. Inquirido sobre ese aspecto por su entrevistadora, se excusó: «Yo estaba manejando un auto, y yo no estaba preparado para cruzármela a Olivia. Claro que está mal que luego yo haya manejado sin casco».
Y sobre el desenlace que él preve, dijo: «Voy a vender la moto de Olivia, cuando vuelva de Mar del Plata. A mí me encantaría que ella se quedara la moto, porque fue un regalo que le hicimos, pero está todo descontrolado. En Saladillo está todo descontrolado».