Pablo Herrera
Las Palmas de Gran Canaria, 23 ene (EFE).- El Dreamland Gran Canaria ha cerrado su primera vuelta con diez victorias en Liga Endesa y otras diez en Eurocopa, un balance que desde el club consideran positivo, pero con una racha final de cuatro derrotas consecutivas -dos en cada competición- que ha dejado en cierto sabor agridulce entre sus aficionados, aunque no para Sitapha Savané, que valora el buen desempeño de la plantilla.
El presidente del Dreamland Gran Canaria defiende en una entrevista con EFE que, para un club de las características del Gran Canaria, conseguir una primera vuelta de diez victorias «es todo un éxito», por lo que huye de análisis presentistas que empañen el rendimiento del equipo y que «pueden dejar una lectura equivocada».
Resalta que «no se debe de perder de vista» haber alcanzado los objetivos de mitad de temporada de clasificar por derecho propio para la Copa del Rey, mantenerse en puestos de cabeza en Europa, que eran «los dos objetivos del principio de temporada para estas alturas», o mantener puestos de play-offs en competición doméstica.
No obstante, admite un pequeño bajón del equipo que achaca a las lesiones de jugadores claves en la plantilla como Andrew Albicy o John Shurna y al cansancio de una plantilla «donde diez jugadores disfrutan la mayor parte de los minutos», que participa en «dos de las tres ligas más duras del mundo» y que realiza viajes muy largos en pocos días, lo que genera «un desgaste que en algún momento pagas».
Por ello, coincide con el entrenador, Jaka Lakovic, en recuperar física y mentalmente al equipo con victorias, que «son siempre el camino más rápido» para recobrar sensaciones y enterrar esta racha negativa en el derbi de este domingo ante La Laguna Tenerife, partido para el que ha hecho un llamamiento a la afición para «empujar juntos».
En lo institucional, Savané se muestra satisfecho del trabajo del club en verano para conformar una plantilla «con mucho talento ofensivo, con piezas que son capaces de tirar del equipo y ganar partido»”, pero que han mantenido la identidad defensiva que viene con Lakovic.
Para el presidente claretiano, otros de los grandes éxitos de la primera vuelta ha sido la respuesta de la marea amarilla, por lo que ha agradecido a la afición su entrega y los ánimos al equipo en un Gran Canaria Arena que ha estado en una media por encima de los 7.000 espectadores en Liga Endesa y los 4.000 en Europa con partidos entre semana, cifras que son «una locura comparado con las cifras que me encontré cuando llegué al club», destaca.
Además, ha reconocido conversaciones y buena sintonía para extender el contrato del entrenado, en un proceso «donde ambas partes quieren», que será cuestión de tiempos y donde «lo normal es llegar a buen puerto». Extensiones que también se negocian en el caso del director deportivo, Willy Villar, y en el contrato del propio Sitapha Savané para continuar como presidente del Gran Canaria.
De cara a la segunda vuelta, Savané es partidario de «ponerse retos siempre a corto plazo» y dividir la temporada en dos para afrontar «con ganas renovadas» la segunda mitad y «no mirar demasiado lejos y tropezar con la primera piedra que está delante».
Para el club, se aproximan semanas clave donde se aúnan «dos de los grandes objetivos»: acabar en las dos segundas plazas del grupo de Eurocopa, condición que perdió tras su derrota en Vilna, pero reto para el que aún quedan opciones, y «hacer un buen papel en la Copa del Rey».
Savané explica que las eliminatorias de Eurocopa «hacen una ilusión especial» cuando sabes qué significa vivir «cuatro semanas de disfrute y comunión con la afición para intentar ganar un título», por lo que admite que «está marcado en rojo», aunque sin olvidar que la temporada sigue y están el objetivo de los ‘play-offs’ de Liga Endesa.
En cuanto a la Copa del Rey, el dirigente amarillo resalta «la motivación especial» que supone para plantilla y club que se juegue en el Gran Canaria Arena y tener «la mayor cantidad de aficionados en las gradas», aunque mantiene el pulso y aboga por «llegar en buen momento de forma» y cumplir un buen papel que, para Savané, pasa por salir del pabellón pensando que el equipo ha sido fiel a su idea y ha demostrado cómo es capaz de jugar.
«A partir de ahí, si Valencia Basket (su rival en cuartos) es mejor, le felicitas y nos iremos en paz, aunque no satisfechos. Con el potencial que tenemos si jugamos como somos capaces daremos alegrías a la parroquia amarilla», detalla Savané.
Pese a no ser muy dado a pedir desde su posición, el presidente alienta a la marea amarilla a «seguir en esta misma línea» y a los jugadores a «creer el potencial que tienen y continuar trabajando» para que, junto a la parcela institucional del club, sigan mejorando la experiencia en el baloncesto y la creación de recuerdos positivos que amplíe aún más la comunión equipo-afición. EFE
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