La inteligencia artificial (IA) está transformando la manera en que vivimos, trabajamos y tomamos decisiones. Sin embargo, este avance no está exento de desafíos éticos, tecnológicos y sociales que exigen un marco claro de regulación. Las normas ISO, reconocidas internacionalmente por establecer estándares de calidad, seguridad y sostenibilidad, están jugando un papel fundamental en garantizar que la IA sea confiable, transparente y justa, especialmente en un contexto de creciente preocupación por la privacidad y la equidad.
Estándares para un futuro confiable. Uno de los grandes retos de la inteligencia artificial es garantizar su desarrollo ético y responsable. La ISO 23894, actualmente en desarrollo y prevista para 2025, busca establecer principios éticos fundamentales para la IA, abordando temas como la transparencia en los algoritmos, la privacidad de los datos y la equidad en los resultados. Esto es crucial en un contexto donde el 72% de los usuarios globales consideran que la transparencia en la IA es un factor clave para confiar en su uso.
Otro ejemplo relevante es la ISO 38505, enfocada en la gobernanza de datos. Esta norma asegura que los datos utilizados por los sistemas de IA sean gestionados de manera justa, ética y transparente, reduciendo riesgos de sesgo y discriminación. En sectores críticos como la salud y la educación, donde la confianza es esencial, estas normativas ofrecen un marco para garantizar que las aplicaciones de IA no solo sean eficaces, sino también respetuosas con los derechos humanos.
En términos de seguridad, la ISO 27001 se ha convertido en un estándar indispensable para proteger los datos manejados por la IA frente a ciberataques. El costo promedio de una violación de datos asciende a US$4,45 millones por incidente, lo que subraya la importancia de adoptar normativas que protejan tanto a las organizaciones como a los usuarios.
América Latina: un foco emergente en IA responsable. América Latina está emergiendo como una región clave en la adopción de estándares internacionales relacionados con la IA. Países como Brasil y México han liderado la implementación de normativas como la ISO 27001 y la ISO 38505, logrando avances significativos en seguridad y gobernanza de datos. Según la ISO Survey, las certificaciones relacionadas con la inteligencia artificial y la protección de datos en América Latina han crecido un 28% desde 2018, destacándose Brasil por haber reducido en un 40% los incidentes de seguridad cibernética en empresas certificadas.
Este crecimiento no solo refleja un compromiso con la ética y la seguridad, sino también una oportunidad económica significativa. Un informe de PwC estima que el mercado de IA en la región crecerá un 32% anual hasta 2025, con aplicaciones clave en sectores como la salud, la logística y la educación. Esto posiciona a América Latina como un actor relevante en la implementación de IA responsable y sostenible, alineada con estándares internacionales.
Pequeñas y medianas empresas, grandes oportunidades. Aunque a menudo se perciben como herramientas para grandes corporaciones, las normas ISO también ofrecen beneficios significativos para las pequeñas y medianas empresas (PYMEs). Estas empresas, que representan más del 90% de las compañías en América Latina, están utilizando estándares como la ISO 27001 para proteger datos sensibles y ganar la confianza de clientes e inversores.
Según la Cámara Internacional de Comercio, las PYMEs que adoptan normas internacionales tienen un 50% más de probabilidades de expandir sus operaciones a mercados globales, lo que las convierte en un motor clave para el crecimiento económico de la región. Además, las certificaciones ISO facilitan el acceso a financiamiento, ya que los inversores prefieren empresas que cumplen con estándares reconocidos, reduciendo los riesgos asociados con el incumplimiento normativo.
El futuro de las normas ISO en IA. Con miras a 2025, las normas ISO seguirán evolucionando para abordar los desafíos emergentes en inteligencia artificial. Además de la ISO 23894, que establecerá directrices éticas, se espera que nuevas normativas aborden temas como la sostenibilidad de los sistemas de IA y su impacto social. Un informe de Accenture revela que las empresas que adoptan estándares internacionales en el desarrollo de IA experimentan un 30% más de confianza por parte de los usuarios y un 20% menos de riesgos asociados.
En este camino, la educación y la capacitación jugarán un papel clave. Organizaciones internacionales y gobiernos locales están desarrollando programas para formar profesionales en la aplicación de estándares en IA. Por ejemplo, la Unión Europea lanzó en 2023 un programa piloto para capacitar a más de 20.000 especialistas en gobernanza de IA, y América Latina está empezando a replicar estas iniciativas en universidades de México, Brasil y Chile.
Construyendo un futuro ético y sostenible. El desarrollo de la inteligencia artificial presenta oportunidades y riesgos únicos. Las normas ISO ofrecen un marco sólido para garantizar que estas tecnologías no solo sean innovadoras, sino también éticas, confiables y responsables. En un contexto global donde la IA está redefiniendo industrias enteras, adoptar estos estándares no es solo una ventaja competitiva, sino una necesidad para garantizar la confianza y el bienestar de las personas.
Al mirar hacia el futuro, las empresas que implementen normas ISO estarán mejor preparadas para enfrentar los desafíos del entorno digital, liderando el camino hacia un desarrollo tecnológico que priorice la transparencia, la equidad y la sostenibilidad. Con estas herramientas, la inteligencia artificial tiene el potencial de convertirse en un motor de progreso inclusivo, beneficiando tanto a las organizaciones como a la sociedad en su conjunto.
*Fernando Arrieta es director regional de G-CERTI Global Certification
por Fernando Arrieta