David Villafranca
Nueva York, 4 nov (EFE).- Los Brooklyn Nets del entrenador español Jordi Fernández se impusieron este lunes por 106-104 a los Memphis Grizzlies de su compatriota Santi Aldama, que falló un triple sobre la bocina y a la desesperada que le habría dado el triunfo a su equipo.
Tras la era dorada de España en la NBA con Pau Gasol y compañía, esta temporada solo hay dos representantes españoles en la mejor liga de baloncesto: el alero Santi Aldama de los Grizzlies y el entrenador Jordi Fernández con los Nets.
Este no era su primer enfrentamiento del curso puesto que la semana pasada Nets se llevó la victoria de Memphis por 106-119.
La historia se volvió a repetir en Brookly con unos Nets (4-4) que, tras el tropiezo del domingo frente a los Detroit Pistons, se recuperaron en este ‘back-to-back’ con una actuación muy coral y seis jugadores por encima de los 10 puntos.
Cam Johnson y Dennis Schroder, con 20 puntos por cabeza, fueron fundamentales para corregir la desacertada noche de Cam Thomas (13 puntos con 6 de 17 en tiros). También resultó clave Dorian Finney-Smith con 17 puntos y un 5 de 8 en triples.
Por los Grizzlies (4-4), Ja Morant regaló dos jugadas increíbles y acabó con 25 puntos y 9 asistencias. Al lado del base brilló el pívot novato Zach Edey con su mejor partido hasta ahora en la NBA: 25 puntos con 11 de 12 en tiros y 12 rebotes.
Aldama fue titular pero no tuvo un gran día. Consiguió 9 puntos (4 de 12 en tiros, 0 de 6 en triples), 6 rebotes y 5 asistencias en unos Grizzlies con un pobre 8 de 30 desde el perímetro.
Por lesiones o por rotación, Brooklyn no contó esta noche con jugadores como Ben Simmons y Noah Clowney mientras que en Memphis fueron baja Desmond Bane, Marcus Smart y Luke Kennard, entre otros.
Además de la explosividad de Morant, en Memphis destacó en el inicio el ‘rookie’ Edey, de 2,24 metros que recorrió la zona como una apisonadora en el primer cuarto con 6 puntos (incluyendo un soberbio mate), 3 rebotes y 2 tapones en solo 6 minutos.
Frente al potente 68,4 % en tiros de campo de los visitantes, a Brooklyn se le atascó el comienzo del partido con un insuficiente 36,4 %. Con todo ello, los Grizzlies cerraron el primer capítulo por delante por 23-30 gracias a 20 puntos en la pintura.
La mejoría de los Nets fue evidente en ambos lados de la cancha: en defensa olvidándose del colador del arranque y en ataque entregando las llaves del coche a Johnson (13 puntos al descanso).
La pájara le llegó entonces a Memphis, pero Morant regaló una jugada espectacular directa a la recopilación de lo más destacado de este inicio de campaña: una preciosa penetración a canasta con un giro de 360 grados en el aire para burlar a la defensa rival.
Morant se fue al intermedio con 13 puntos pero los Nets lograron una mínima ventaja antes de marcharse al vestuario (50-49).
La primera parte no fue precisamente un recital desde el perímetro con un 5 de 19 en triples de Brooklyn y un 3 de 16 de Memphis.
En la reanudación, Morant fue de nuevo el centro de los focos con otro fabuloso giro de 360 grados en el aire, este tras amagar con un mate para terminar con una bandeja.
La estrella de los Grizzlies encontró el apoyo de Edey, que solo jugaba si Nic Claxton estaba en pista, pero que se puso las botas con 13 puntos bajo el aro.
Por los Nets, Thomas no encontraba la manera de activarse pero Johnson seguía tremendamente enchufado. A él se unió Finney-Smith con 3 de 3 en triples en ese cuarto y los de Fernández desembarcaron en el desenlace por delante (83-79).
Ningún equipo llegó a tener un +10 a lo largo de la noche por lo que el encuentro parecía destinado a un final muy apretado, tanto que se llegó con empate a 101-101 a falta de 90 segundos.
Un inspiradísimo Finney-Smith clavó un triple para Brooklyn y Schroder, muy importante en los momentos decisivos, abrió un +5 con una buena defensa sobre Morant y una bandeja a continuación.
Jaren Jackson Jr. devolvió el golpe para los Grizzlies con un triple y los Nets no anotaron en su posesión por lo que dejaron 4.2 segundos en el reloj para los visitantes.
La jugada apuntaba a Morant pero el balón acabó en Aldama, que se jugó un triple muy lejano y en carrera que salió cruz. EFE