El secretario de Bioeconomía, Fernando Vilella, recibió este martes a las nuevas autoridades del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el presidente Juan Cruz Molina y la vicepresidenta María Beatriz «Pilu» Giraudo.
Antes del encuentro, el funcionario saludó a las autoridades salientes y planificó el trabajo a futuro con la nueva gestión, informaron desde la cartera agropecuaria.
Vilella reafirmó que el INTA será el «faro tecnológico» que marque el camino para lograr la transformación que plantea su cartera.
El organismo aporta desde la ciencia a las políticas públicas en el marco estratégico de la Bioeconomía, llegando al territorio por medio de la extensión y transferencia tecnológica, explicaron.
Por su parte, las autoridades del INTA solicitaron al secretario que los acompañe en el espacio del Consejo Directivo -un esquema de gobernanza público-privado que data desde la fundación del organismo- a lo que se comprometió rápidamente.
De esta manera acordaron potenciar el trabajo articulado con la Secretaría, en sintonía con los demás organismos descentralizados, Senasa, Inase y, de manera federal, con los gobiernos provinciales.
María Beatriz Giraudo destacó: «Mi nuevo rol lo siento como un privilegio, y una enorme responsabilidad; me da muchísima tranquilidad secundar a un presidente que conoce al INTA, que viene trabajando hace años en la institución» «Con ‘Pilu’ Giraudo planteamos al secretario que vamos a trabajar para hacer un INTA grande, reconocido por impulsar la innovación y contribuir al desarrollo sostenible fortaleciendo su referencia nacional y global», sostuvo Molina.
Molina agregó que es un «INTA con una T cada vez más destacada, porque siempre aportamos desde la Tecnología, desde los talentos que trabajan en el Instituto y desde la transformación, donde va a haber cambios necesarios».
Por su parte, Giraudo destacó: «Mi nuevo rol lo siento como un privilegio, y una enorme responsabilidad; me da muchísima tranquilidad secundar a un presidente que conoce al INTA, que viene trabajando hace años en la institución».
«Y por otro lado, ser parte de un organismo que no solo es un orgullo para Argentina, sino que tiene referencia a nivel global», concluyó.