Un casero de 61 años fue asesinado de un tiro en la nuca en un asalto a una estancia de la zona conocida como Gran Malagueño, a unos 20 kilómetros de la ciudad de Córdoba. Además, maniataron a su mujer que también estaba en la casa. Los delincuentes, que según la policía fueron cuatro y son intensamente buscados, sólo se llevaron cien mil pesos y una carabina.
El violento asesinato tuvo lugar este lunes entre las 13 y las 14 en la estancia «La Lagunilla», donde delincuentes armados saltaron la tranquera, atravesaron el campo e irrumpieron en la casa del cuidador, alejado del casco principal de la estancia. En principio, se cree que fue con fines de robo.
Fuentes policiales confirmaron que el casero Julio Prudencio «Lito» Toranzo, alguien muy conocido en toda la zona, fue ejecutado de un tiro en la nuca.
La policía del lugar no entiende qué motivo tanta saña en el taque. El lugar donde robaron es alejado, y en la zona sólo estaban Toranzo y su mujer de 62 años.
De acuerdo al testimonio de la viuda, los asaltantes actuaron desde el inicio del robo de manera muy violenta, y amenazaron de muerte a la pareja mientras les exigían dólares. «Dame los dólares que tenés guardados» repetían mientras golpeaban a la víctima.
«Mi hermano había ido a buscar viruta para los caballos así que mis padres estaban solos en la estancia», contó Daniel, hijastro de la víctima.
En diálogo con Cadena 3, el hombre mostró su tristeza por lo acontecido con su padrastro. «No entiendo porqué hicieron eso. Él era un hombre de campo de toda la vida. No tenía gente que le tuviera bronca. Los ataron a los dos de pies y manos y le dispararon a Lito por la espalda. No se entiende… Atado, ¿qué les iba a hacer?», se preguntó Daniel. Y agregó: «Mi madre logró ver que se movilizaban en motos, una era roja«, confirmó.
La mujer le contó a la Policía que a ella la amordazaron, la ataron a una silla y le pusieron una sábana en la cabeza para que no vea nada. pero que después de varios minutos de insultos y violencia, en la otra habitación «escuchó un disparo».
La estancia en la que se produjo el crimen está compuesta por casi dos mil hectáreas. Se trata de un lugar apartado y se llega por caminos rurales de tierra. Para llegar hasta donde robaron, hay que recorrer bastante, por lo que se presume que los delincuentes conocían la zona.
De hecho, la mujer tuvo que hacer a pie un kilómetro y medio para dar con un vecino y poder llamar al 911 para alertar de lo sucedido a la Policía.
«Al parecer, (los delincuentes) tenían algún dato que en realidad era equivocado. Esta pareja de caseros no tenía un dinero importante en la casa ni había movido alguna suma fuerte en el último tiempo, sino que vivían de su sueldo como caseros», apuntó una fuente investigativa a Cadena 3.
El fiscal Ricardo Mazzuchi, de Villa Carlos Paz, quedó a cargo de la investigación del crimen. Y por estas horas, la Policía intensifica la búsqueda de los cuatro sospechosos.
D.D.