Chagas: la UBA desarrolló una vacuna que está lista para probarse en humanos

El Chagas, enfermedad con más de 6 millones de infectados en el mundo, está cada vez más cerca de dejar de ser un problema, se esperanzan en la Universidad de Buenos Aires, donde este viernes (en coincidencia con el Día Nacional por una Argentina sin Chagas) anunciaron la recta final del desarrollo de la vacuna nasal Cuzivax, que pronto empezarán a testear en humanos.

“Esperamos que nos permita desarrollar una estrategia de vacunación profiláctica y otra terapéutica que sean eficaces para proteger de la infección o mejorar la evolución y el pronóstico de individuos que padecen la enfermedad de Chagas”, contó Emilio Malchiodi, al mando del proyecto de esta vacuna, desde su puesto a cargo del Instituto de Estudios de la Inmunidad Humoral de la UBA-Conicet.

El tema no es menor: según datos de 2020, en Argentina habita el 20% de la población mundial con Chagas. Son 1,5 millones de personas distribuidas en distintas provincias. Y aunque 10 de las 19 jurisdicciones con Chagas endémico fueron certificadas como “libres de transmisión vectorial domiciliaria”, el contagio perinatal (de madre a feto) sigue siendo problemático.

La vinchuca es el insecto vector que transmite el parásito responsable de la enfermedad de Chagas.

La vinchuca es el insecto vector que transmite el parásito responsable de la enfermedad de Chagas.

En este contexto, lo interesante de la vacuna es que no sólo podrá utilizarse preventivamente sino también de forma terapéutica, para personas ya infectadas. La intención es que esas personas logren modular mejor la respuesta inmune y protegerse de la enfermedad. La intención es que se use “en solitario” (usando una expresión común en el sector) y también en combinación con una de las drogas más usadas para la enfermedad de Chagas, el benznidazol.

“Nos aprovechamos del sistema inmune de mucosas, que puede generar una respuesta inmune importante que luego se hace sistémica. Es decir, aparecen los anticuerpos en la mucosa nasal, y luego en el torrente sanguíneo. Es lo que se conoce como recirculación linfocitaria entre todas las mucosas”, detalló.

En concreto, gracias a ingeniería genética, los investigadores lograron desarrollar un antígeno a partir de porciones de tres proteínas del parásito que transmite la vinchuca (el insecto vector), centrales para infectar y penetrar en las células humanas.

“Este antígeno quimérico, que llamamos Traspaína, en combinación con un adyuvante de última generación, demostró ser protectivo contra la infección por Trypanosoma cruzi”, explicó Malchiodi.

Seguridad de la vacuna contra el Chagas

El equipo de investigación pasó las pruebas en ratones, perros y primates no humanos, y se hicieron estudios de producción de los distintos componentes para tener la certeza de que pueden administrarse a humanos.

También se hicieron los estudios de seguridad y toxicidad, y se precisó la formulación de la vacuna para administración nasal, información que, contaron, presentarán ante las entidades regulatorias correspondientes, de modo de tener la autorización del estudio de fase I y evaluar, así, la seguridad y la dosis.

La vinchuca, vector del parásito que produce Chagas, es una suerte de chinche común en la Argentina.

La vinchuca, vector del parásito que produce Chagas, es una suerte de chinche común en la Argentina.

El proyecto Cruzivax recibió apoyo económico europeo, y está formado por un consorcio internacional de 11 grupos de investigación y desarrollo con capacidades complementarias, incluyendo al de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la UBA, tres grupos en Portugal, uno en España, otros en Francia, Hungría, Alemania y Bélgica.

Visibilizar el Chagas

Avanzar con una vacuna de última generación, barata y de fácil administración (por vía nasal, sin agujas) cobra especial relieve cuando se miran las cifras alarmantes de esta enfermedad tan poco mencionada.

Cada año, el Chagas mata a unas 12.000 personas en el mundo y unos 9.000 recién nacidos se infectan durante la gestación, ya que sus madres, asintomáticas, ignoraban portar la enfermedad.

Además, por la proliferación del insecto vector (la vinchuca), se considera que unos 70 millones de personas viven en áreas expuestas al Chagas, enfermedad endémica en 21 países, la mayoría de América latina.

Cómo se transmite el Chagas

La transmisión ocurre cuando el insecto defeca en la piel, lo que conduce a que la persona se rasque y se facilite la entrada del parásito Trypanosoma cruzi, causante de la enfermedad.

chagas

La única forma en que se puede contagiar de persona a persona es a través de transfusiones de sangre, trasplante de órganos, o de una madre a su feto. Otra vía puede ser el consumo de alimentos y bebidas contaminadas con las heces de la vinchuca.

Si bien el Chagas es casi totalmente curable si se trata en las etapas iniciales con medicamentos, el principal problema con esta enfermedad es que muchos desconocen estar infectados durante la etapa en que deberían ser tratados, ya que los 2 a 3 primeros meses son asintomáticos. A la vez, los fármacos utilizados en su tratamiento tienen importantes efectos secundarios en la salud de los pacientes.

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