Madrid, 1 nov (EFE).- La Alta Velocidad entre Madrid y la ciudad de Valencia, epicentro del fuerte temporal que azota a España, estará operativa «como mucho» en 15 días, ya que en uno de los dos túneles afectados no se han producido daños «más allá de la inundación».
Así lo indicó este viernes el ministro español de Transporte y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, en una entrevista en Radio Nacional de España, (RNE), la radio pública, donde detalló que sí hay que reconstruir el otro túnel de esta línea ferroviaria, que une la capital con el levante español, y que tradicionalmente tiene una gran afluencia de viajeros.
El fuerte temporal (dana) que azotó la provincia de Valencia (este) el pasado martes ha provocado al menos 155 muertos y un número indeterminado de desaparecidos, así como enormes daños materiales en infraestructuras viarias, la red de agua, eléctrica y de telefonía, así como en cultivos, negocios, casas y propiedades.
Puente señaló que el Gobierno ya aprobó trece millones de euros para comenzar a restituir «con urgencia» la autovía del Mediterráneo (A7), que recorre toda la costa del levante español, de sur a norte del país y por la que a la altura de Valencia es imposible de transitar, lo que dificulta el transporte de mercancías y de personas.
El ministro espera que en 10 o 12 días se pueda abrir al tráfico a una velocidad limitada gracias a la instalación de unos «cajones», y volvió a remarcar que la situación es «tremendamente grave», con 80 kilómetros de la red de carreteras del Estado afectadas por el temporal.
También anunció 12,2 millones de euros para la reparación de otras vías y recordó que la autovía que une Madrid con Valencia (A3) está abierta únicamente para los servicios de emergencia, pero hay que circular «haciendo eses» debido a los daños y a la acumulación de vehículos.
El ministro insistió en que «la circulación es muy difícil» y por ello se pide a la ciudadanía «que no se desplacen si no es imprescindible».
También están muy afectadas las líneas de trenes de cercanías de Valencia, ya que de las cinco líneas existentes tres han desaparecido.
En cuanto a las infraestructuras de saneamiento, Puente afirmó que están «seriamente dañadas», tanto las de suministro como las de abastecimiento, por lo que «va a tardar mucho tiempo» en recuperarse la normalidad y hay que buscar «cauces alternativos» y en eso están volcando todos los esfuerzos.
Todos estos datos dan idea de la magnitud del desastre, y tres días después, los servicios de emergencia se afanan en llevar agua y comida a miles de personas que lo han perdido todo, en medio del lodo, el barro y la destrucción.
Sobre las zonas a las que todavía no pudo llegar la ayuda, el ministro aseguró que por parte del Ejecutivo se han puesto todos los medios al servicio del Gobierno regional de Valencia y apuntó que ayer ya se estaba hablando de que varios helicópteros se sumaran al dispositivo para trasladar suministros a esas zonas.
Además, desde hoy, a los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias que están trabajando en la zona, se suman 500 nuevos militares -300 del Ejército de Tierra, 100 de Aire y 100 de la Armada-. EFE