Marcó un doblete y dos asistencias frente al Jeonbuk Motors de Corea del Sur. El brasilero volvió a las canchas tras la lesión que sufrió en marzo.
Cerca de seis meses después de su lesión frente al Lille en marzo, Neymar volvió a jugar en el PSG con un doblete y una asistencia frente al Jeonbuk Motors (3-0), el jueves en Busán, Corea del Sur.
Con Kylian Mbappé castigado por el club debido a su situación contractual y Lionel Messi fuera ya del equipo, ‘Ney’ es ahora la única gran estrella del PSG.
Celebró su regreso con dos goles y una asistencia de tacón a Marco Asensio marca de la casa. ‘Ney’ marcó su primer gol tras una serie de regates y finalizó con una finta de planta para engañar a los defensores y anotar con ayuda del poste (40).
El segundo tanto llegó tras escaparse por la izquierda y batir al guardameta Kim Jeong-hoon (83).
Así, el brasileño iluminó el final de pretemporada del París Saint-Germain, que desde la victoria contra Le Havre (2-0) y el inicio de la gira asiática acumulaba un empate a cero contra Al-Nassr y dos derrotas contra Cerezo Osaka (3-2) e Inter de Milán (2-1).
Neymar no jugaba desde su lesión contra el Lille (4-3) en el Parque de los Príncipes, el pasado 19 de marzo, partido en el que había marcado el segundo gol de su equipo.
El staff y el jugador optaron por una operación «de reparación del ligamento, con el fin de evitar un riesgo mayor de recaída», explicó entonces el club.
Después de tres partidos en el banquillo durante la parte japonesa de la gira asiática, para gran decepción del público, el brasileño aguantó los 90 minutos en una formación experimental.
Así, Neymar se reencuentra con el París SG en un episodio más de una complicada relación «con o sin amor», como dijo en una entrevista en el canal Youtube del periodista deportivo e influencer Casimiro Miguel.
«Espero (jugar esta temporada) en el PSG, tengo un contrato con el París Saint-Germain y hasta ahora nadie me ha dicho nada», dijo sobre una supuesta salida.
Fue antes de que se apartara a Kylian Mbappé, que no ha querido renovar su contrato y que rechaza ser traspasado este verano, dejando en el aire el riesgo para el PSG de perder a su estrella gratuitamente en junio de 2024, al final de su contrato.
«Estoy tranquilo, incluso si no hay mucho amor entre los aficionados y el jugador. Yo estaré ahí con o sin amor», rió Neymar durante la entrevista grabada el 22 de junio.
El español Luis Enrique, nuevo entrenador el club, que ganó una Liga de Campeones con Neymar en el FC Barcelona en 2015, le situó en la izquierda de su sistema 4-3-3, con gran libertad para el brasileño que buscó combinar con sus compañeros, Hugo Ekitike y Marco Asensio.
Luis Enrique cambió a diez jugadores de campo respecto al partido disputado 46 horas antes en Tokio contra los Nerazzurri.
Sólo mantuvo a Gianluigi Donnarumma en el once titular, pero el guardameta italiano fue sustituido en el descanso por el costarricense Keylor Navas.
En el centro del campo había un Mbappé, pero el hermano pequeño Ethan, de 16 años, alineado junto a Marco Verratti con el brazalete de capitán y a Cher Ndour.
También tuvo minutos para brillar ante su público el nuevo fichaje surcoreano del PSG Lee Kang-in, que entró como sustituto de Ekitike a falta de 20 minutos bajo una ovación.
Después de una primera media temporada genial y otra pasada en la enfermería, Neymar mostró en su regreso los servicios que puede poner todavía a disposición de un PSG necesitado de estrellas. Es que, sin Messi ni Mbappé, el brasilero es el último fantasista del Paris Saint-Germain.
Con información de EFE